Lástima que seamos tantos, en el mundo tantos.
El feminismo se interpone entre tu mirada y la mía mientras
tus labios se dedican a soslayar.
El feminismo se interpone entre tu mirada y la mía, pero ya estamos
decididos en desobedecer.
Siempre habrá más pureza en el quiero que en el puedo.
Hace años una bandera se movía en Paris. No vaya a
ser nuestro destino disfrazado de melancolía y perdón.
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